martes, 14 de agosto de 2001

Momentos [Mementos] Turísticos

El solo levantar vuelo a Porlamar desata reflexiones. Sobrevolando Cubagua, ¡qué sitio más bueno!.. para montar la madre de todos los Sobreviviendo, colocando 10.000 ultra pro y 10.000 ultra contra chavistas y dejar que, desarmados, negocien un proyecto de islote. 

Aterrizo en el Internacional de Porlamar y especulo sobre el impacto que para Joe W. de Texas, fanático del turismo aventura, tendría una foto donde “Er Arcarde” le entregue, para su uso personal, un chaleco antibalas último modelo marca Cavim. 

En el aeropuerto confirmo que las tiendas tipo “duty free”, que en el mundo entero significan precios altos, quedan como camufladas y no destacan en una zona “free de duty” y me recuerdo haber propuesto gravar a “L’Aisla” con unos altísimos impuestos, para luego fomentar el turismo de evasión fiscal, reivindicando así su venerable tradición contrabandista. Para Hans de Hamburgo, no debe existir cabeza de antílope que pueda competir con un certificado de evasión fiscal emitido por la Cámara de Comercio. 

Y siguiendo la misma vena, imagínense la tímida y obediente Lisa de Birmingham, tomándose una foto “negociando con las autoridades”, con ese gordito de tránsito que siempre me paraba en el cruce de la Rómulo Gallegos con Los Ruices. 

Hans y Helga, los ambientalistas de Ámsterdam, recordarán sus protestas frente a las plantas eléctricas que queman petróleo, por culpa de los genios que prefieren atravesar la Gran Sabana con un tendido eléctrico, para venderle nuestra hidroelectricidad a Brasil, más barata de la que compramos a Colombia. 

Frank de Boston podrá visitar el museo del Miss Venezuela, que deberían construir y Moníque de Cannes, reconstruir su ego en Playa El Agua, notando que aún hay quienes no son indiferentes a sus descubiertos. 

Finalmente y como gran regalo de salida, todos encontrarán en su hotel, encuadernada en cuero, copia de la Gaceta Oficial del 15 de Julio de 1998, que contiene el Instructivo No. 1 para el Servidor Público, que entre otros, en el Artículo 19 obliga al uso del “Usted”, prohibiendo familiaridades, como “mi amor”. 

Hace tiempo leí la etiqueta de un refresco, que orgullosamente proclamaba “Garantizado 100% artificial” y aprendí acerca de la importancia de la actitud mental. Francamente, Margarita es demasiada Isla para seguir la mismita ruta que las demás del Caribe, donde ya, hasta en las franelas de souvenir podemos leer, “Diferente Isla ... misma mierd....”

Publicado en El Universal el 14 de Agosto de 2001


jueves, 10 de mayo de 2001

Políglotas Margariteños

¿TE CUENTO LA HISTORIA? Muchos hemos respondido con un sí a esa pregunta, cuando la formulan esos vivaces y dicharacheros niños, que se ofrecen como guías, en la isla de Margarita. Muy pronto en Puerto de La Mar, el puerto de cruceros de Margarita, se iniciarán cursos para que decenas de jóvenes, cual superguías globalizados, reciban en varios idiomas a miles de turistas.

La meta es que cada uno de ellos, folclóricamente trajeados y supervisados, aprendan a narrar diez asuntos relacionados con Venezuela, en tres minutos por tema, en siete idiomas, incluyendo alguno exótico y todos con un pronunciamiento impecable. El sueño es formar los baquianos que ayuden al país a encontrar un rumbo por la senda del turismo.

¿Puerto de La Mar? ¿Un puerto de cruceros? ¡Pues sí! Permitiéndome parafrasear lo de Margarita en el Caribe, no hay duda de que este puerto es casi el secreto mejor guardado en Margarita. El otro día lo vi y simplemente no lo podía creer. Los que conocen de mi entusiasmo por el turismo y por Margarita, sabrán lo feliz que estoy.

Especialmente feliz ya que, en lugar de ser un proyecto turístico cobarde , de los que se amparan en explotar la naturaleza virgen, es valiente por cuanto al abrir las puertas a nuestro país sobre el bulevar Guevara, en Porlamar, también ayudará a reconstruir áreas deprimidas y deprimentes.

Especialmente feliz porque creo que los promotores, grupos privados y la Alcaldía, con el apoyo de la Gobernación y demás autoridades, están conscientes de que el reto no es sólo el construir con vigas y concreto, el reto es con creatividad y cariño, buscar aquellos equilibrios externos e internos, que un proyecto como éste requiere. En lo externo, el equilibrio turístico se consigue en ese justo punto donde lo desconocido se encuentra con lo conocido, en otras palabras, donde el turista siente que se encuentra en un lugar nuevo, fresco e interesante, que le amplía sus perspectivas, pero no le crea inseguridad. Ello resulta de especial importancia para el turista de cruceros, tan conservador que ni siquiera pernocta, pero que cuando le gusta, se sabe que regresará buscando la experiencia total.

Si el equilibrio externo es difícil de lograr, aún lo es más el interno. Un puerto de cruceros, como entrada al país, debe lograr retener los suficientes atractivos y puntos de venta que justifiquen su propia inversión, pero debe simultáneamente evitar convertirse en una odiosa alcabala, que lo enemistaría tanto con el turista como con la comunidad. ¿Cómo lograrlo? No hay una sola respuesta, pero lo básico es que exista la conciencia del problema y, en este caso, la hay. Una comisión autónoma de puerto, que representa los variados intereses, es una de las opciones.

Pero, volviendo a nuestros baquianos políglotas-diplomáticos en formación. ¿De qué van hablar? Bolívar a caballo, la vida de Luisa Cáceres de Arismendi, Humboldt y la Gran Sabana, Simón Díaz y la tonada, la orimulsión y el ibis scarlata son sólo algunos de los temas, pero aceptan sugerencias.

El Puerto de La Mar pronto abrirá otra puerta de Venezuela al mundo. Pero antes, con orgullo, debemos abrirle a esa iniciativa la puerta de nuestros corazones y darles nuestro apoyo. Para quien tenga acceso a Hugo, por favor ruéguele, que venga para que le cuenten la historia, y para que vea el futuro.